En la imagen, tomada en el río Pilcomayo, se puede divisar en una de las orillas la presencia de una extraña figura humanoide de color gris. Experto en ufología exigió una investigación por parte de las autoridades.
La comunidad boliviana se encuentra conmocionada por un particular fotografía que fue tomada en las orillas del río Pilcomayo, en el departamento de Tarija, y que generó un gran revuelo en las redes sociales luego de ser difundida por el medio local Notivisión.
Lo cierto, es que la imagen completa está centrada en una persona que se encuentra de pie sobre una roca a un lado del río. Sin embargo, en la otra orilla y muy en segundo plano, aparece una figura enigmática que parece tener el clásico aspecto de un extraterrestre de tipología «gris».
De igual manera, los comentarios de los internautas fueron de un lado a otro de la credibilidad, desde el asombro por la posible captura de algún tipo de ser alienígena o interdimensional, hasta el llano escepticismo que sugiere que podría tratarse de una simple pareidolia o un fotomontaje.
«Al borde del río Pilcomayo, se observa a este ser paseando o caminando. En la instantánea, se puede apreciar un ser medio transparente con extremidades alargadas, características típicas de lo que se conoce como un ser gris», afirmó el ufólogo boliviano Javier Carlos Cordero al ser consultado por el medio.
Pedido de investigación
No obstante, antes de seguir especulando sobre lo observado, el ufologo instó a que la imagen original se someta a un proceso de análisis «a través de un filtro que determine su autenticidad y si ha sido sometida a manipulación digital». «Solo entonces podremos discernir si estamos ante una evidencia genuina o un producto de edición», agregó el ufólogo.
Es importante subrayar que por el momento no se tiene un contexto claro de quién tomó la imagen y en qué circunstancias, ni hay un relato testimonial que acompañe la fotografía. Esto es siempre motivo para plantar una bandera roja sobre el material fotográfico hasta obtener dicha información.
Aún así, Cordero piensa que la historia del lugar inclina un poco la balanza hacia lo desconocido, siendo Tarija un escenario donde se han dado numerosos avistamientos y casos ovni, los cuales algunos conectan con un posible interés en los recursos minerales de la región.
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