Abreviaturas

Las abreviaturas se inventaron para escribir más aprisa y ocupar menos espacio. Pero pueden ser indescifrables, y no son elegantes.

Ahorrar espacio es ahorrar papiro, pergamino, papel o superficie disponible en monumentos.

En la antigua Roma, cincelar la abreviatura SPQR (que proclamaba al Estado como supremo dador) ahorraba cincelar la frase completa: Senatus Populus-que Romanus (Senado y Pueblo de Roma).

La locución latina et cetera ‘y lo demás’ se abrevia en muchos idiomas como etc., pero a los tipógrafos les parece fea como palabra final de un párrafo; donde prefieren escribir la palabra completa: etcétera.

Abreviaturas de la Roma cristiana: INRI (Iesus Nazarenus Rex Iudæorum), RIP (Requiescat in pace).

Abreviar tiene equivalentes en el habla cotidiana: prepa, foto, bici o Tere en vez de preparatoria, fotografía, bicicleta o Teresa. Pero apocopar (omitir el final de palabras usuales) es algo del habla común, no tiene el aire técnico de sustituir palabras o frases por unas cuantas letras que las representen.

Las abreviaturas fueron inventadas por especialistas en escribir: los escribas, y tienen algo de jeroglíficos, que son su antecedente. Los egipcios fueron creando cada vez más jeroglíficos. Llegaron a ser miles. ¿Quiénes podían memorizar su dibujo y significado? Los especialistas.

Una simplificación y avance del sistema fue inventar jeroglíficos limitados a representar consonantes (las vocales se sobrentendían): pasar de representar significados a representar el habla. Los fenicios avanzaron de esos pictogramas a las letras. Después se reinventaron los jeroglíficos, pero con letras: las abreviaturas, hace miles de años.

Hay quienes escriben cartas abreviando que por q. El resultado es feo. Y hubo escribas que abusaban de las abreviaturas hasta volver los textos ilegibles. Enfadado, el emperador Justiniano (482-565) se fue al extremo opuesto: prohibió a los escribas toda abreviatura.

Las abreviaturas también han llegado a ser miles. Los diarios las inventan para ahorrar espacio en sus titulares. Hay que adivinar el significado o seguir leyendo la noticia para saber de qué se trata.

Si una persona inventa abreviaturas para su propio uso, como una especie de taquigrafía personal; o si dos acuerdan usar un código secreto de abreviaciones; estamos ante abreviaturas privadas.

Además, existen abreviaturas no privadas, pero de uso restringido a un gremio (médico, computacional).

Las abreviaturas de uso general son otra cosa: parte de la lengua escrita. En los diccionarios de la lengua, aparecen como una lista aparte (que no todos advierten), para que las descifre el que lee. Sería bueno añadir su reversión: la lista de palabras o frases que tienen abreviatura, para que las use el que escribe.

Todavía mejor sería intercalarlas en el diccionario, por partida doble: al final de la palabra abreviada y como entradas aparte. Por ejemplo: “ingeniero, ra [De ingenio ‘máquina, artificio mecánico’ y -ero] 1 m. y f. Persona con titulación universitaria superior que la capacita para ejercer la ingeniería en alguna de sus ramas. Abrev. Ing.” Y, además, después de infusorio y antes de inga: “Ing. Abrev. de ingeniero, ra.”

Parece que no hay estadísticas del uso de cada abreviatura. Las usuales en México pueden agruparse en cinco categorías:

Tratamientos. Varían con el tiempo y las costumbres de cada país. En México es común Sr., pero no Sr. D. (señor don), usual en España. Tratamiento redundante, porque don viene del latín dominus que significa ‘señor’.

En inglés, Mrs. y Miss (Sra. y Srita.) son impugnadas por el feminismo que prefiere Ms. En español, pudiera usarse Sa. o el popular Seño.

Dr. se presta a confusiones: ‘médico’ o ‘doctorado’.

Algunas abreviaturas militares no son breves: Gral. Ala pa dema (general de ala piloto aviador diplomado del Estado Mayor Aéreo).

Unidades de medida. Desde 2019, existe un Sistema Internacional de Unidades basado en fenómenos físicos fundamentales. Por ejemplo: define lo que es un metro en relación con la velocidad de la luz.

Es un acuerdo universal, a diferencia del sistema métrico decimal, impuesto en 1800 por Napoleón y rechazado hasta el siglo XX por otras potencias imperiales: Inglaterra y los Estados Unidos, que finalmente lo adoptaron.

Pero no existe una convención universal sobre las abreviaturas respectivas. De metro hay dos: m (un golpe de tecla) y mt. (tres). Afortunadamente, la Academia de la Lengua recomienda la más breve, aunque muchos escriben mt.

Números. Las cantidades escritas con letra ocupan mucho espacio. Los números romanos fueron una buena abreviatura, y más aún los arábigos. Pero usarlos para cantidades pequeñas es feo y no ahorra tanto. Por ejemplo: Hace 2 años 2 amigos… Es preferible usar letras hasta quince y números desde 16.

La palabra número se abrevia cuando antecede una cifra: Núm. 123 o, mejor, # 123; que se escribe de un golpe, en vez de cuatro.

Es redundante escribir la palabra pesos y el signo de pesos: $200 pesos. Basta $200 o 200 pesos.

Siglas y acrónimos. Los nombres de personas morales pueden representarse por abreviaturas de dos maneras. La más antigua se forma tomando la primera letra de cada palabra importante del nombre: sus siglas. El resultado puede ser pronunciable (onu, unesco) o impronunciable (stprm, Sindicato de Trabajadores Petroleros de la República Mexicana).

La otra manera es formar un acrónimo: tomar más de una letra, buscando que el resultado sea pronunciable. Por ejemplo: Banamex, en vez de bnm, para el Banco Nacional de México.

El uso de abreviaturas y acrónimos se extendió a muchos nombres largos de cosas que no son personas morales. En algunos casos, se volvieron palabras: radar (radio detection and ranging), láser (light amplification by stimulated emission of radiation), ovni (objeto volador no identificado).

Nombres de los estados. Todos tienen abreviaturas, que pueden abreviarse todavía más, reduciéndolas a dos mayúsculas, sin puntos.

Aguascalientes > Ags. > AG
Baja California > B. C. > BC
Baja California Sur > B. C. S. > BS
Campeche > Camp. > CA
Chiapas > Chis. > CS
Chihuahua > Chih. > CH
Ciudad de México > CDMX> CD
Coahuila > Coah. > CU
Colima > Col. > CM
Durango > Dgo. > DG
Estado de México > Edomex > EM
Guanajuato > Gto. > GT
Guerrero > Gro. > GR
Hidalgo > Hgo. > HG
Jalisco > Jal. > JA
Michoacán > Mich. > MI
Morelos > Mor. > MO
Nayarit > Nay. > NA
Nuevo León > N. L > NL
Oaxaca > Oax. > OA
Puebla > Pue. > PU
Querétaro > Qro. > QE
Quintana Roo > Q. r. > QI
San Luis Potosí > S. L. P. > SL
Sinaloa > Sin. > SI
Sonora > Son. > SO
Tabasco > Tab. > TB
Tamaulipas > Tamps. > TM
Tlaxcala > Tlax. > TL
Veracruz > Ver. > VE
Yucatán > Yuc. > YU
Zacatecas > Zac. > ZA

Explicación: co no se puede usar para ningún estado, porque evoca dos: Coahuila y Colima. cl tampoco, y por la misma razón: puede ser Coahuila o Colima. cd no evoca más que la Ciudad de México. cm también la evoca, pero además evoca a Colima. No veo mejor solución que usarla para Colima.

Las abreviaturas actuales se escriben con cuatro, cinco o seis golpes de tecla. Las propuestas, con dos; por lo general, las dos primeras letras de la abreviatura actual. Cuando esto produce homónimos (CO para Coah. y Col.), la segunda letra se cambia en ambos casos (CU y CM). Excepción (aparente): CH y CS (Chih. y Chis.).

En 2018, las cartas, revistas y paquetes distribuidos por el Servicio Postal Mexicano fueron 582.1 millones. Además, las empresas de mensajería distribuyeron 839.8 millones. Total: 1421.9 millones de envíos, con remitente y destinatario. Lo cual implica dos abreviaturas de estado en cada envío y, en total, casi 3,000 millones. ~