Amupac: ¿hay una base extraterrestre que protege a Tampico de los huracanes en México?

Sucede mucho. Cada que un evento catastrófico cae sobre los seres humanos, intentamos darle una explicación a eso que nos rebasa. En México, es común que afloren teorías conspiranóicas sobre cómo los aliens tienen bases en el volcán Popocatépetl, hacen rituales de conexión en Tepoztlán e, incluso, construyeron las pirámides más magníficas de Mesoamérica. Ahora resulta que los extraterrestres construyeron un punto de operación para proteger la costa norte de México, conocido como Amupac, de fenómenos naturales.

Aunque nada de esto tiene un fundamento científico verídico ni fidedigno, la teoría volvió a ganar fuerza tras la llegada de Alberto, la tormenta tropical que llenó de vida las reservas de agua del país. ¿De dónde viene, y por qué se ha popularizado la idea de que los extraterrestres protegen al norte de México desde Amupac? Esto es lo que sabemos hasta el momento.

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¿De dónde viene la teoría de que hay una base alienígena submarina en Tamaulipas?

Tamaulipas es un estado en la costa norte mexicana, que colinda con el Golfo de México. En Ciudad Madero, específicamente en la playa de Miramar, se dice que hay una base alienígena submarina, conocida como ‘Amupac’. Lo curioso es que, efectivamente, si se busca el punto en Google Maps, sí aparece un punto con ese nombre en los registros satelitales. Si se busca “Base OVNI Cd. Madero”, documentan los medios locales, aparece fácilmente en el mapa.

Los registros de las autoridades locales no apoyan estas ideas. De hecho, destacan que “Ciudad Madero es la capital petrolera más importante” del país. Sin embargo, esta teoría no es nueva. Se empezó a rumorar sobre la supuesta base alienígena submarina en la década de los 60, cuando la población local reportó avistamientos de luces extrañas sobre el mar. Luego, de objetos voladoes no identificados (OVNIs). Alrededor de la misma época, empezaron a ‘aparecer’ los círculos de cultivo en Estados Unidos.

En ese momento, el punto de operaciones extraterrestre en el mar no tenía nombre. Sólo se conocía a voces, por los relatos de la gente en la playa. Sobre todo, porque Tampico y Ciudad Madero —que están muy cerca la una de la otra— dejaron de ser blanco de los huracanes. A pesar de que varios de estos fenómenos entran por el Golfo a México, y muchas veces tocaban tierra por Tamaulipas, ninguna de estas ciuades parecía afectada por ellos.

La teoría de conspiración ganó todavía más fuerza después de que un turista estadounidense, en la década de los 70, afirmó que los extraterrestres lo habían contactado en las costas tampiqueñas. Sólo a él le habían concedido el ‘honor’ de saber el punto exacto en donde estaba la base alienígena. Todo apuntaba a que estaba en las profundidades del mar, en el puerto de Miramar. Es muy probable que sólo estuviera bajo la influencia de estupefacientes.

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Amupac no es una base extraterrestre debajo del mar

Muy pronto, la idea de que hubiera una base extraterrestre en el mar de Tamaulipas se convirtió en un motivo de orgullo para Ciudad Madero. En la playa, incluso, hay letreros que señalan en dirección del punto donde supuestamente se encuentra sumergida. En los registros de las autoridades locales, sin embargo, no hay un ápice de información sobre la supuesta base alienígena submarina de Amupac.

Sin embargo, esta teoría retomó fuerza tras la divulgación pseudocientífica de Alberto Zecua, un supuesto ingeniero mexicano que se mete a las fauces de los volcanes a buscar vida extraterrestre. Fue él quien le dio nombre a este supuesto punto de operación alienígena, que después se popularizó por el apoyo de la Asociación de Investigación Científica OVNI de Tamaulipas (AICOT).

Aunque parece increíble, algo así existe. No cuenta con el apoyo de ninguna institución de renombre científico, y más bien ha sido relegada al campo de las teorías de conspiración. Con respecto al hallazgo falso de Amupac, Zecua dijo lo siguiente:

«No es un viaje físico, sino astral, para el que es necesario prepararse emocionalmente, mediante un proceso de desintoxicación del cuerpo y no consumir carne (…) Al lograr el contacto, que en ocasiones es solo con llamarlos, nos metemos a la esfera -de luz- sobrevolamos la ciudad, nos vamos a la playa”, detalla el pseudocientífico sobre su propia experiencia. Nadie sabe, en realidad, a qué se refiere con ello.

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¿Por qué es racista pensar que los aliens construyeron las pirámides y nos protegen de fenómenos naturales?

Cualquiero medio que afirme que hay una base extraterrestre en Tamaulipas no cuenta con sustento científico. Hasta el momento, no conocemos una civilización inteligente extraterrestre. Y mucho menos, una que cohabite con los seres humanos, para protegerlos de catástrofes meteorológicas o erigir edificios de dimensiones monumentales.

Pensar que sólo los alienígenas, y no civilizaciones milenarias que sí desarrollaron ciencia y conocimiento, pudieron construir los mejores edificios de la época precolombina desestima la capacidad de los pueblos mesoamericanos. No sólo eso: sugiere que estas civilizaciones eran incapaces de lograrlo, por lo que recurrieron a una civilización fuera de este mundo para lograrlo. Nada de eso, además, es cierto.

Otra manera de verlo es la siguiente: ¿por qué no se dice que los alienígenas construyeron las catedrales imponentes en Europa? Y, ¿por qué sí creer, en la misma lógica, que los extraterrestres erigieron Chichén Itzá? Lo mismo para pensar que los aliens nos protegen de fenómenos naturales. Tampico, Ciudad Madero y cualquier lugar que colinde con el Golfo de México es propenso a ser blanco de huracanes y otros fenómenos naturales. Sobre cuándo pasará, o por qué no ha pasado en décadas, bueno… la meteorología es una ciencia difícil de predecir con exactitud.