Los cielos de Nueva York y Vermont fueron el escenario de un espectáculo que dejó a muchos residentes mirando hacia arriba con asombro.
El pasado lunes 3 de junio, formaciones nubosas que recordaban a Objetos Voladores No Identificados (OVNIS) aparecieron entre las nubes, capturando la atención de todos y convirtiéndose en un fenómeno viral en las redes sociales. Aquí te explicamos qué sucedió y la interpretación científica de este curioso evento.
Las imágenes virales mostraban nubes con formas que evocaban a los OVNIS, un fenómeno poco común pero no desconocido para la ciencia. Según los expertos, estas formaciones se producen cuando un avión atraviesa una capa fina de nubes situadas entre 1,981 y 6,096 metros sobre el nivel del suelo.
Estas nubes contienen gotas de agua sobreenfriada que, al interactuar con el avión, pueden transformarse en cristales de hielo y caer, dejando un rastro visible en el cielo.
El Misterio de las “Nubes Perforadas”
Cuando varios aviones pasan por la misma capa de nubes, pueden causar un fenómeno conocido como “nubes perforadas” o nubes OVNI. Estas formaciones son tan grandes que incluso pueden ser detectadas por satélites meteorológicos desde el espacio.
Aunque se requieren condiciones climáticas específicas para su formación, las nubes perforadas pueden manifestarse en cualquier lugar con tráfico aéreo. Recientemente, han sido observadas en el centro de Nueva York el 31 de mayo, en Nueva Zelanda el 17 de marzo, en el sur de Florida el 30 de enero y en Massachusetts el 23 de enero de 2024.
¿Cómo se crean estas Nubes OVNI?
Las nubes perforadas, a menudo confundidas con OVNIS debido a su forma, son el resultado de un proceso conocido como “enfriamiento adiabático”. Este fenómeno se produce exclusivamente en nubes altocúmulos o cirrocúmulos, que se encuentran a una altitud media-alta y están compuestas por gotas de agua sobreenfriadas, es decir, a temperaturas por debajo de los 0°C pero aún en estado líquido.
Cuando un avión atraviesa estas nubes, el aire circundante se expande y enfría, provocando que las gotas de agua se congelen y caigan, creando un agujero visible en la capa nubosa. Este agujero se expande a medida que el proceso afecta a las gotas de agua sobreenfriadas cercanas, dando lugar a las impresionantes nubes OVNI.
