Hace décadas el científico Enrico Fermi se preguntó cómo era posible que ninguna civilización hubiera contactado con nosotros todavía. Esta misma inquietud es la que persigue también Elon Musk, que ha reiterado varias veces que «todavía no he visto extraterrestres». Aunque parezca una locura para muchas personas, se trata de una duda más que razonable.
La Tierra ha transmitido luz y señales de radio al espacio durante poco más de un siglo. Este tiempo longevo para los humanos, supone una pequeña fracción entre los 100 millones de años de esperanza de vida en el espacio. Si las estrellas similares al Sol hubieran tenido un episodio similar, tan solo habría habido 1.000 civilizaciones entre 100.000 millones haciendo lo mismo en el mismo preciso momento.
Por lo tanto, la separación entre civilizaciones sincronizadas se podría cifrar en 1.000 años luz. Como nuestras retransmisiones son recientes, tan solo habría extraterrestres a una distancia de 100 años luz capaces de captar nuestra tecnología. De hecho, incluso a distancias más próximas, requeriríamos mejores telescopios.
Es decir, hay una probabilidad baja de que alguien capte nuestras transmisiones electromagnéticas si su civilización es similar a la nuestra en este momento. Además, incluso si nos llegaran a detectar a una distancia de 100 años luz, tardaríamos otro siglo antes de recibir noticias suyas.
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