El Cosmos es demasiado vasto como para que carezca de indicios de vida biológica o inteligente. Siempre se ha pensado que existen otras civilizaciones inteligentes, pero hasta ahora no ha habido ni una sola prueba fehaciente que respalde esta hipótesis.
La realidad es que aún queda para poder cruzarnos con alguna civilización extraterrestre. Según un reciente estudio publicado en la revista The Astrophysical Journal, se estima que deberemos esperar alrededor de 400.000 años antes de tener nuestro primer contacto con seres de otros planetas.
Wenjie Song y He Gao, investigadores de la Universidad Normal de Pekín, llevaron a cabo un cálculo inicial con el objetivo de estimar el número de civilizaciones inteligentes extraterrestres que podrían haber intentado establecer comunicación con nosotros. En este proceso, definieron dos parámetros clave: la probabilidad de que surja vida en un planeta específico y la fase evolutiva de la estrella hospedadora de dicho planeta.
Los dos científicos idearon nueve escenarios con distintos niveles de probabilidad en relación con la existencia de civilizaciones inteligentes extraterrestres (CETI).
En el contexto de la Vía Láctea, estimaron que podría haber alrededor de unas 110 civilizaciones (una cifra relativamente baja considerando la vasta cantidad de planetas y sistemas planetarios). Sin embargo, para que pudieran emitir una señal mínima, debían subsistir durante aproximadamente 400.000 años, no solo para comunicarse con nosotros, sino para hacerlo en general en el espacio.
Los investigadores sugieren que, en el escenario más optimista, si existieran 43.000 CETI en lugar de los 110 considerados como escenario más realista, aún requerirían al menos unos 2.000 años para enviar su primer saludo cósmico.
«La razón por la que no hemos recibido ninguna señal todavía puede ser que nuestra vida como civilización que puede comunicarse con las demás no es lo suficientemente longeva», explicron Song y Gao. «Sin embargo, se ha propuesto que es muy probable que la vida de las civilizaciones sea autolimitada, lo que se conoce como argumento del Juicio Final, debido a que muchas perturbaciones potenciales para la civilización, como los problemas de hiperpoblación, apocalipsis nuclear, cambios climáticos repentinos, choque de asteroides… pueden acaecer, los humanos no podríamos recibir ninguna señal de comunicación de otras CETI antes de que se extingan».
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