Ufólogo asegura haber tenido un encuentro con OVNI en el Valle de Elqui

El músico y ufólogo Rodrigo Iter, creador del Portal Ufo
Chile, asegura haber vivido una experiencia con un OVNI en el Valle de
Elqui el pasado lunes 14 de agosto.

Según su testimonio, entregado a El Observatodo, relata que “a
eso de las 19 horas, me llega un video de un objeto volador con movimientos
extraños, entrando al sector La Campana, quebrada Uchumí en el Valle de Elqui,
yo tomé mis cámaras y me dirigí al lugar. Cuando llego a Vicuña me avisan que
habían avistamientos en Pisco Elqui, por lo que decidí ir a ese lugar primero.
Luego al bajar una de las personas que estaba en Pisco Elqui me pide si la
puedo traer de vuelta, yo le dije que si, pero que primero tenía que pasar a la
quebrada Uchumí”.

Fue en ese lugar que el investigador en terreno, habría
experimentado un encuentro único. “Al llegar a la quebrada, había una oscuridad
absoluta, es un pequeño valle encajonado entre cerros de más de 500 metros de
altura, tiene un ancho de 100 metros aproximadamente. Esa noche no había luna,
por lo que las estrellas se veían mejor aún. Cabe destacar que en ese lugar no
hay internet ni señal de teléfono, tampoco viven personas, no hay casas ni
nada, al menos en el sector al que concurrimos habitualmente”.

Durante la vigilia, Iter presentía que algo ocurriría. “A eso
de las 2am, mientras conversaba con mi acompañante, le digo algo que siempre me
ha dado vueltas en mi cabeza, mientras observábamos el cielo, le digo: “yo
pienso que estos seres al ser Inter dimensionales, deben tener contacto con
nuestros familiares que ya han partido, familiares que han muerto, yo creo que
ellos tienen contacto con mi papá….apenas termino de decir eso, se ilumina
toda la quebrada Uchumí, yo miraba hacia la cordillera en ese momento, tenía mi
auto en frente, y lo único que hago es caminar lento hacia atrás, mientras
observo el cerro que estaba en frente mío, iluminado por completo, pasamos de
la oscuridad absoluta, a estar de día prácticamente, de inmediato miro a mi
derecha, luego a mi izquierda, y veía hasta la punta del último cerro más
lejano”, señaló.

“Tuvimos ambos un par de segundos de sordera, fue tremenda
esa sensación, por mi cabeza pasaron todos los relatos de abducciones, y de
personas que habían vivido lo mismo, esperaba que me subieran a la nave, junto
con eso sentía todo tipo de sensaciones, alegría, miedo, euforia, mucho de
todo. Traté de mirar hacia arriba, las estrellas, pero no podía, la luz era muy
intensa, un blanco que jamás en mi vida había visto, de pronto mi acompañante me
dice que se había puesto sobre el cerro a mis espaldas, me doy vuelta y alcanzo
a ver la mitad de una luz circular sobre el cerro, y se va a una velocidad
impresionante. Yo me quedé tan impresionado que no hablaba nada, solo observaba
el cerro, cuando reacciono tenía mis ojos con lágrimas, lo atribuyo a que fue
por la luz demasiado potente. Luego nos acordamos que tenía mi cámara haciendo
un timelaps con fotografías en alta exposición, 15 segundos cada foto, 250 en
total, iba como en la fotografía numero 120 más menos, nos acercamos a la
cámara y estaba apagada, no entendía por qué si la batería siempre me duraba
para 600, 700 fotos de ese tipo, y de repente, la cámara enciende ante nuestros
ojos y siguió sacando fotos como si nada, al revisar las 250 fotos no había
nada, no entendemos que pasó. Sabemos que ellos manejan un tipo de aparatos
electromagnéticos que frenan todo tipo de objetos electrónicos, y esto lo
corroboraba”, finalizó.

Créditos fotográficos: Recreación de Rodrigo Iter.