Primera parte
Los relatos de avistamientos desde la antigüedad de objetos voladores no identificados (ovnis) y contactos de diferentes tipos se validan hoy día con los testimonios que Estados Unidos posee naves y restos biológicos no humanos.
Diversos anales, incluyendo la Biblia, refieren la llegada y visitas de seres fuera de la Tierra, como, según el Génesis, los “hijos de Dios” tomaron mujeres y procrearon gigantes, los llamados nefilim.
Para estudiosos de la ufología, término acuñado luego de las primeras oleadas ovnis, al final de la II Guerra Mundial, los referidos “hijos de Dios” son seres que provinieron de las Pléyades, según “El Libro de Enoch”.
Enoch es citado (Génesis 5:18), como un patriarca longevo de una séptima generación de Adán y afirman que describió a esos “200 ángeles” que aterrizaron en el Monte Hermón, ubicado entre Siria, Líbano e Israel.
LAS VIMANAS Y EL “ROSWELL” DE FRANCIA
Textos antiguos del hinduismo, el Mahabharata y el Ramayana, ilustran sobre las vimanas o naves en que volaban los “dioses”, y los anales de Tutmosis III, que gobernó entre 1484 y 1450 antes de Cristo, refieren el avistamiento de objetos celestes que rodeaban al mismo faraón, así como a su ejército y los escribas.
Como parte de los sucesos de la ovnilogía, en uno de los pasajes de las visiones del profeta Ezequiel, se cuenta de un vehículo extraño en el cielo y su aterrizaje, cerca del río Quebar (Irak), durante el cautiverio judío (592 antes de Cristo), en el reinado de Nabucodonosor, de Babilonia.
Otro hecho singular lo recoge el “Kojiki” (Relación de las cosas viejas), la historia de Japón, compilada en el 712 por O no Yasumaro, a orden de la emperatriz Gemmei, sobre el bamboleo en el cielo de dos objetos luminosos que se apagaban de forma alterna y que creyeron eran los planetas Marte y Júpiter.
Estudiosos de la ovnilogía también señalan que un informe de la policía describió un suceso parecido al de Roswell (1947), cerca de Alençon, Francia, el 12 de junio de 1790, cuando un objeto cayó en la cima de un cerro y el calor era tan intenso que la vegetación se quemó en la cuenca.
UFOLOGÍA MODERNA
Como se ha apuntado el término ufología se acuñó luego de los sucesos de 1947, después del fin de la II Guerra Mundial, con los casos del piloto aéreo Kenneth Arnold y la localidad de Roswell, Nuevo México, Estados Unidos.
La historia registra que el 24 de junio de 1947, el piloto Kenneth Arnold afirmó haber avistado nueve ovnis en cadena cerca del Monte Rainier, Washington, mientras se encontraba buscando una aeronave militar extraviada a bordo de una avioneta CallAir A-2.
Sus relatos a la prensa dieron vida a la famosa frase “flying saucers” o “platillos voladores”, como los avistados y fotografiados por el suizo Eduard Albert “Billy” Meier, quien afirma tener contacto con seres de aspecto nórdico provenientes de las Pléyades.
Unos días después, el 10 de julio de 1947 se registra el “Caso Roswell”, cuando el ranchero Mac Brazel reporta el hallazgo de una nave estrellada y cuerpos alienígenas (supuestamente de zeta reticulianos) cerca de Corona, Nuevo México y que la Fuerza Aérea corrobora, pero que al día siguiente cambió la versión que se trató de un experimento con globos aerostáticos.
Para ese tiempo, la Fuerza Aérea de Estados Unidos (USAF) decidió investigar “la primera gran oleada ovni” y reemplazaron el término “platillos volantes” por el de ovni (UFO, siglas en inglés), y que ahora a nivel oficial llaman Fenómenos Anómalos No Identificados (FANI).
EN HONDURAS
En el caso de Honduras, en la occidental zona maya de Copán, funciona para esta región el centro de luz de la misión Rahma (“luz para la humanidad”), uno de cuyos precursores es el contactado peruano Sixto Paz.
Autor de libros y conferencista internacional, Paz, junto a sus hermanos se interesaron en los ovnis por su padre, Carlos Paz García, fundador en Lima, Perú, del Instituto Peruano de Relaciones Interplanetarias (IPRI) y su primer avistamiento de una nave fue en 1974, en el desierto de Chilca, como lo atestiguó el periodista español Juan José Benítez, autor de la saga de “El Caballo de Troya”.
Paz afirma haber sido llevado a Ganímedes o Morlen (una de las lunas de Júpiter) y al planeta Apu, de la constelación de Alfa Centauro, y con algunos de cuyos seres han interactuado también otros contactados como el boliviano Luis Fernando Mostajo y el peruano Ricardo González, quien sostiene haber sido llevado a la base espacial Celea, cercana a la Luna.
Sixto Paz también ha convocado a la prensa internacional a avistamientos programados con antelación en más de diez ocasiones, sobre todo en el desierto de Chilca, cerca de Lima y que afirma es un vórtice magnético, igual que el cerro El Picacho y la zona de “La Tigra”, Distrito Central, son sitios especiales para el avistamiento de naves.
Paz, González y Mostajo han visitado Tegucigalpa y otras ciudades y regiones de Honduras, como el centro de luz en Copán, y además de impartir conferencias han interactuado con los grupos de contacto hondureños y han confirmado que sobre la zona central hay una intensa actividad ovni.
ESTADOS UNIDOS
Unos meses antes que en Tegucigalpa, en junio pasado, se avistaran ovnis y se captaron en fotos de teléfonos celulares, entre el 4 y el 12 de febrero, aviones de la Fuerza Aérea de Estados Unidos, derribaron cuatro objetos no identificados que volaban sobre los cielos de América del Norte, pero solo del primero se supo que era un globo de China Popular.
De forma sorprendente, el miércoles 26 de julio pasado tres exoficiales atestiguaron ante un subcomité de la Cámara de Representantes (Congreso) de Estados Unidos, que su país ha ocultado durante décadas un programa que recupera y hace ingeniería inversa a aeronaves de origen no-humano.
Los testigos David Grusch, Ryan Graves y David Fravor, declararon bajo juramento ante la subcomisión de Seguridad Nacional, Frontera y Asuntos Exteriores del Comité de Supervisión de la Cámara de Representantes que Estados Unidos está en posesión de aeronaves de origen extraterrestre, igual que ha recuperado y posee restos biológicos de entes no-humanos.
Grusch, Graves y Fravor dijeron que podían ofrecer más detalles a los congresistas en un foro privado/confidencial.
Por: Luis Alonso Gradiz M.
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